La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) denunció graves violaciones de derechos humanos por parte de grupos "herederos de los paramilitares" en Colombia y consideró que hubo "fraude" en su desmovilización, unas acusaciones tildadas de falsas por el gobierno. El director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, habla en una conferencia de prensa en Bogotá el 3 de febrero de 2010. El director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, habla en una conferencia de prensa en Bogotá el 3 de febrero de 2010. La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) denunció graves violaciones de derechos humanos por parte de grupos "herederos de los paramilitares" en Colombia y consideró que hubo "fraude" en su desmovilización, unas acusaciones tildadas de falsas por el gobierno. El director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, sostuvo que "a partir del mismo minuto" en que se desmovilizaron los grupos paramilitares en Colombia, en un proceso que se extendió entre 2003 y 2006, surgieron las nuevas organizaciones "que los reemplazaron". "Estos grupos tienen gran incidencia en la situación de derechos humanos en regiones rurales alejadas, pero también en zonas urbanas", dijo Vivanco en una rueda de prensa en la que citó en particular el caso de Medellín (noroeste), segunda ciudad del país en la que los homicidios se han duplicado en el último año. De acuerdo con el informe "Herederos de los paramilitares. La nueva cara de la violencia en Colombia", estos grupos tienen presencia en 24 de los 32 departamentos (provincias) de Colombia y son los principales responsables de "abusos graves y generalizados" contra la población civil, los defensores de derechos humanos y los dirigentes sindicales. Human Rights Watch refirió que, según la policía colombiana, estos grupos reúnen a unas 4.000 personas en ocho organizaciones diferentes. El informe fue rechazado por el gobierno colombiano. El ministro de Defensa, Gabriel Silva, aseveró que "no se basa en la realidad". "No tiene información sino especulaciones, son generalidades que cuando uno las confronta con los hechos nunca son capaces de demostrarlo. Es una mentira", dijo Silva a periodistas. "Yo lamento las declaraciones del ministro de Defensa. Le pediría que mirara con más cuidado el informe. Creería que no lo ha mirado y creo que no le hace un buen servicio a su país al reaccionar de esta manera", dijo Vivanco, quien en la tarde se reunió con el ministro del Interior, Fabio Valencia. Al término del encuentro entre Vivanco y Valencia, el ministerio expidió un comunicado en el que reiteró la descalificación al informe: "Es sesgado y denota falta de información, objetividad y conocimiento del funcionamiento y trabajo conjunto de las instituciones del Estado colombiano", dijo. Al mismo tiempo, el canciller Jaime Bermúdez añadió: "Si bien reconocemos las dificultades también deliberamos y controvertimos cuando consideramos que hay informes sesgados, como éste. Pero para mejorar hay que trabajar juntos y no echarse el agua sucia". Durante la presentación del informe, Vivanco recordó al gobierno de Alvaro Uribe "que tiene obligaciones para enfrentar a esos grupos y proteger a la población civil". "Creemos que hay una actitud pasiva y un discurso dirigido a minimizar la importancia de este problema", dijo. El informe citó entre los abusos las "masacres, ejecuciones, violaciones sexuales, amenazas y extorsión", estas últimas especialmente en contra de sindicalistas. Además, HRW registró un incremento del desplazamiento forzado de personas entre 2004 y 2007 "que coincide con la desmovilización de las AUC y el surgimiento de estos nuevos grupos", indicó Vivanco. HRW pidió al gobierno de Estados Unidos "supeditar no sólo la ayuda militar sino también policial al juzgamiento de los miembros de las fuerzas de seguridad pública que colaboran con los grupos sucesores". Además, solicitó "continuar postergando la ratificación del Tratado de Libre Comercio hasta que el gobierno colombiano cumpla los requisitos sobre derechos humanos". Vivanco destacó que solamente cuatro fiscales y doce investigadores están asignados a tiempo completo para abordar el tema de los grupos sucesores. "El gobierno colombiano ha invertido anualmente un millón de dólares en propaganda en Washington en un esfuerzo fracasado de conseguir la ratificación del TLC. Me pregunto cuántos fiscales se pudo haber contratado con esos recursos", dijo.
El balance de muertos por el sismo de Haití supera los 200.000, con más de 300.000 heridos, dijo el miércoles el Primer Ministro a la AFP, mientras se anunció que los diez estadounidenses presos por el caso de "niños robados" podrían conocer su suerte el jueves.
Haitianos caminan frente a las ruinas de edificios colapsados el 3 de febrero de 2010 en Puerto Príncipe.
El miércoles también cientos de haitianos protestaron en Puerto Príncipe para expresar su rabia contra el gobierno, incapaz de saciar las necesidades de un pueblo aplastado por un terremoto.
En cuanto al nuevo balance de víctimas, el Primer Ministro Jean-Max Bellerive dijo en una entrevista con la AFP que aumentó en 30.000 muertos el saldo anterior de las autoridades.
"Hay más de 200.000 personas que fueron identificadas claramente como muertas", dijo Bellerive, y agregó que los 300.000 heridos habían sido internados "en hospitales, centros sanitarios y ambulatorios", y que 4.000 personas sufrieron amputaciones.
En cuanto a los diez estadounidenses que intentaron sacar de Haití a 33 niños sin permiso luego del terremoto, serán transferidos el jueves a la Fiscalía de Puerto Príncipe, que decidirá si tiene o no lugar un juicio por tráfico infantil, anunció este miércoles el juez del caso a la AFP.
"Obtuve la información preliminar y pasé el caso a la Fiscalía. Corresponde ahora a la Fiscalía decidir el siguiente paso en este caso", si son enjuiciados o no los diez estadounideses, declaró el juez de Paix de Delmas (centro de Puerto Príncipe), Isai Pierre-Louis, a cargo del caso.
Los portavoces de la organización que está velando por estos menores, SOS Village, indicaron que "entre 15 a 20 niños de este grupo" -cuyas edades oscilan entre dos meses y 12 años- afirmaron tener padres, de quienes dieron nombres e incluso direcciones.
Por otra parte, los habitantes de los campamentos de refugiados que se erigieron en Puerto Príncipe tras el terremoto del 12 de enero manifestaron su ira cerca de la alcaldía de Pétion-Ville contra el gobierno y las autoridades que no hacen llegar la ayuda requerida por los damnificados, constataron periodistas de la AFP.
En este lugar en el sudeste de la capital haitiana, donde viven las clases medias altas rodeadas de villas miserias, varios manifestantes lanzaron declaraciones desafiantes contra el presidente René Préval, la policía y la prensa.
En la tarde otra manifestación de unas 200 personas se realizó frente a la embajada estadounidense para expresar el mismo descontento con la entrega de ayuda, dos horas antes que el director adjunto para Haití de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Anthony Chan, mencionara los logros de su misión en la primera fase de limpieza de escombros.
Chan explicó en una conferencia de prensa donde asistieron sobre todo periodistas haitianos el lanzamiento del programa "Cash For Work" (Dinero por Trabajo), que prevé contratar a unos 20.000 haitianos para labores de reconstrucción a cambio del salario mínimo del país, 200 gourdes (5 dólares) por ocho horas de trabajo.
"Para mí es natural que (la gente) se sienta así (frustrada) después de una catástrofe de esta magnitud", dijo ante una prensa molesta porque las iniciativas de ayuda no están llegando a la mayoría de los afectados por el sismo. "Estamos haciendo lo mejor que podemos", agregó.
La ONU y representantes de distintas ONG de todo el mundo no han logrado ejecutar un plan eficaz de distribución de la ayuda internacional a los damnificados, quienes sienten que el saco de arroz de 25 kg o el agua llegan como una cuestión de suerte.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, le pidió al ex presidente de Estados Unidos Bill Clinton que "asuma un papel de liderazgo" en la coordinación de la ayuda internacional a Haití.
0 comentarios:
Publicar un comentario