Capotillo fue anoche campo de batalla

Una batalla campal se produjo anoche  en el ensanche Capotillo entre agentes de la Policía y miembros de grupos populares y jóvenes vinculados al tráfico de drogas, que dejó un saldo de dos heridos de bala y un vehículo incendiado.
Los enfrentamientos  se llevaron a cabo por segundo día  en protesta por la muerte a tiros de José Luis Familia Estévez (Balaguer).
Durante la balacera, que empezó desde que anocheció, resultaron heridos de bala Ramón Almonte Rodríguez, de 55 años, frente a la casa  36 de la calle Diego Velázquez;  y el obrero haitiano Emilio Baszi, de 25.
Almonte Rodríguez fue  baleado en el pecho y el haitiano Bazzi en la espalda.
Ambos están internados en el hospital Doctor Francisco Moscoso Puello.
 Los manifestantes también incendiaron un carro Toyota Camry, azul, propiedad de un resient del ensanche Capotillo,  que no fue identificado.
Jóvenes que participaban en las protestas con la cara cubierta con pañuelos o  capuchas  portaban armas de fuego públicamente con las que disparaban a los agentes.
Residentes en Capotillo aseguraron que las protestas de anoche fueron una verdadera batalla campal durante la cual la Policía disparó con escopetas y otras armas largas y los manifestantes con  armas similares o de mayor calibre, inclusive Uzi.
  En los enfrentamientos con la Policía se juntaron jóvenes de Capotillo que participan en organizaciones populares y conocidos vendedores de drogas.
Miembros del Consejo de Desarrollo de Capotillo (Condeca), juntas de vecinos y otras organizaciones comunitarias se desligaron de las protestas de los últimos dos días.
Moradores de Capotillo dijeron que sectores muy vinculados a la delincuencia aprovechan cualquier desafuero de la Policía para realizar protestas con un elevado nivel de violencia.
Aseguraron que estas protestas en Capotillo se producen por el apresamiento de jóvenes y por otros hechos que no tienen nada que ver con la comunidad y sus intereses.
Aunque manifestaron que en Capotillo no hay servicio de electricidad gran parte del día afirmaron que las protestas no se realizan por esa causa.
Vecinos del sector lamentaron que tantos jóvenes armados con armas largas vivan en ese sector donde desarrollan sus negocios de venta de drogas a la vista de todo el mundo.
   Un vendutero del mercado, que pidió no ser identificado, dijo que ya no se sabe quiénes son los dirigentes de grupos populares y quiénes los vendedores de drogas debido a que todos participan en las mismas protestas.
Pidieron a las autoridades buscar una solución al problema de la violencia.
Armas de todos los calibres
Moradores del ensanche Capotillo aseguran que jóvenes de ese sector tienen armas de todos los calibres, muchas de ellas de mayor alcance que las de la Policía.
Explicaron que algunos vendedores de drogas tienen ametralladoras israelíes  Uzi.