Charisa Coulter una de los 10 misioneros bautistas arrestados por cargos de secuestro de menores entra a una patrulla de la policía rumbo a un hospital el miércoles 17 de febrero de 2010. (Foto AP/Ramon Espinosa)
Charisa Coulter una de los 10 misioneros bautistas arrestados por cargos de secuestro de menores entra a una patrulla de la policía rumbo a un hospital
Jorge Puello
En esta foto de archivo del 8 de febrero del 2010, el abogado Jorge Puello que fue contratado por los familiares de 10 estadounidenses que fueron arrestados cuando intentaban trasladar a niños fuera de Haití sin los documentos pertinentes ni con el permiso del gobierno haitiano, llega a un tribunal en Puerto Príncipe. Puello reconoció que es buscado en El Salvador bajo acusaciones de contrabando de personas.
PUERTO PRINCIPE (AP) — Ocho misioneros estadounidenses fueron liberados el miércoles de una prisión en Haití, casi tres semanas después de ser acusados de secuestro infantil, por tratar de sacar a un grupo de niños del país, devastado por un terremoto.
Los ocho, visiblemente desgastados y sudorosos, salieron caminando de lo que fue su prisión en Haití, justo antes del ocaso del miércoles. Escoltados por diplomáticos estadounidenses, los ocho fueron llevados a un hospital de campo norteamericano dentro del aeropuerto. Se desconocía si podrían viajar a Estados Unidos el miércoles o el jueves.
Una vez que estuvieron seguros dentro del vehículo que los transportó, todos sonrieron y saludaron, levantando los pulgares.
Kimberly Flowers, de la embajada estadounidense, no confirmó si los liberados se marcharán de Haití en un avión fletado por el gobierno norteamericano. Señaló que no podía dar la información por respeto a la privacidad.
Flowers dijo que, como ciudadanos estadounidenses, los ocho tenían derecho a que se les asignara un vuelo para salir del país.
Se negó a la prensa el ingreso a la pista del aeropuerto de Puerto Príncipe, a donde fueron llevados los misioneros liberados. El abogado defensor Aviol Fleurant dijo que el grupo saldría de Haití el miércoles por la noche, con un destino desconocido.
Más temprano, un juez haitiano dijo que había decidido liberar a ocho de los 10 estadounidenses bautistas tras escuchar las declaraciones de los padres de los menores a quienes trataron de sacar del país. Al parecer, los padres dijeron que entregaron sus hijos voluntariamente a los misioneros.
El juez Bernard Saint Vil dijo a The Associated Press que los ocho podrán salir de Haití sin depositar fianza o bajo otras condiciones.
"Los padres de los menores hicieron declaraciones que demostraban que pueden ser liberados", dijo a la AP al explicar que la entrega de los niños había sido voluntaria.
Los misioneros bautistas, la mayoría provenientes de dos iglesias de Idaho, están acusados de intentar llevar a 33 niños a República Dominicana el 29 de enero sin la documentación necesaria. El incidente surgió justo cuando las autoridades humanitarias intentaban detener las adopciones precipitadas e irregulares tras el terremoto.
Los detenidos dijeron que se encontraban en una misión humanitaria para rescatar a los niños que sufrían penurias tras el terremoto y que pensaban llevarlos a un orfanato creado con celeridad en República Dominicana. Por ahora han negado las acusaciones en su contra sobre tráfico de personas.
La líder del grupo, Laura Silsby, dijo originalmente que sólo tenían consigo a niños huérfanos y abandonados, pero los reporteros descubrieron que varios de los niños habían sido entregados por sus padres, quienes pensaban que los bautistas les darían una mejor vida.
Saint Vil dijo que aún quiere interrogar a Silsby y a otra integrante del grupo, Charisa Coulter, acerca de una visita que realizaron a Haití en diciembre antes del terremoto, pero que por lo pronto pidió la hospitalización de Coulter pues padece diabetes.
El miércoles Coulter recibió brevemente atención médica, pero volvió a la cárcel.
Fuera de la cárcel el Secretario Estatal de Asuntos Penales Claudy Gassent dijo que visitó al grupo y les informó de su liberación.
"Nos da gusto que la corte Haitiana haya liberado a Paul, Silas, Drew y Steve", dijo Caleb Stegall, abogado del distrito de Kansas que ha ayudado a algunos de los acusados.
"Sus familias están aliviadas y ansían que regresen a casa a salvo, así que ahora estamos concentrados en traerlos a casa"
Gary Lissade, abogado de Jim Allen dijo que esperaba que los cargos contra los ocho acusados fueran desechados.
El grupo pasó por un chasco cuando se descubrió que un hombre que trabajó brevemente como su consejero legal y vocero en República Dominicana es un prófugo de la justicia por cargos de tráfico de personas en su contra, tanto en Estados Unidos como en El Salvador.
Las autoridades estadounidenses dicen que buscan a Jorge Puello, que también tiene una orden de aprehensión en República Dominicana emitida por la Interpol en El Salvador, donde la policía afirma que dirigió una banda que engañaba a jovencitas y niñas para convertirlas en prostitutas. En Estados Unidos tiene una orden de arresto por una violación a su libertad condicional.